El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro arremetió este viernes en contra del sistema judicial de su país, luego de que el Supremo Tribunal Federal (STF) le impusiera nuevas medidas cautelares.
"Nunca pensé en huir de Brasil o ir a la embajada", dijo el líder ultraderechista, quien ahora tendrá que portar una tobillera electrónica, permanecer en su domicilio entre las 19.00 y las 07.00 horas, y tendrá prohibición del uso de redes sociales. Además, no podrá comunicarse con diplomáticos ni acercarse a las legaciones de otros países.
En criterio de Bolsonaro, el objetivo de las nuevas disposiciones es una "humillación suprema". En la mañana, la Policía Federal de Brasil llevó a cabo una operación en su residencia y en otras propiedades vinculadas a su formación, el Partido Liberal (PL).
"Nunca pensei em sair do Brasil (...) No meu entender, o objetivo é uma suprema humilhação. Esse que é o objetivo", diz ex-presidente Jair Bolsonaro após ser alvo de operação da PF. #ConexãoGloboNews➡ Assista à #GloboNews: https://t.co/bFwcwLpLU9pic.twitter.com/KfyU8jzatM
— GloboNews (@GloboNews) July 18, 2025
"Registraron y confiscaron mi casa, se llevaron 7.000 reales [equivalentes a 1.265 dólares] y aproximadamente 14.000 dólares, todo debidamente registrado allí, con su origen", aseguró el expresidente, quien está en la mira de la justicia por su presunta participación en una trama golpista contra Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
En ese sentido, reafirmó que el proceso que se sigue en su contra es "político" y que "no hay nada en concreto" que lo pueda implicar en un eventual atentado contra la democracia. "No hay pruebas de nada", insistió.
Las medidas se impusieron luego de que el magistrado del STF, Alexandre de Moraes, considerara que el expresidente y su hijo, el diputado Eduardo Bolsonaro, actuaron para permitir la interferencia de otros países en la justicia brasileña.
Los señalamientos surgen después de que ambos hicieran declaraciones públicas para afirmar que podrían levantarse las sanciones unilaterales de EE.UU. contra Brasil, si se dictaba una amnistía en su favor.
Las medidas arancelarias dictadas por el presidente estadounidense, Donald Trump, pecharán con 50 % a las mercancías del país suramericano. El inquilino de la Casa Blanca ha respaldado a Bolsonaro y asegura que el proceso judicial que se le sigue es una "caza de brujas".