El acuerdo entre Estados Unidos y los países europeos sobre el nuevo esquema de entrega de armas al régimen de Kiev va camino de estancarse, debido a la negativa de la Administración del presidente Donald Trump de enviar armas de su arsenal, recoge Bild, que cita fuentes gubernamentales alemanas.
Según el medio, el plan preveía que, ante la necesidad que tiene Kiev de sistemas antiaéreos Patriot adicionales, Alemania compraría dos a Washington por unos 2.000 millones de dólares para luego destinarlos a Ucrania. Sin embargo, resulta que Berlín no solo pagará, sino que, probablemente, tendrá que enviar su propio sistema de defensa aérea, porque el mandatario estadounidense se niega a renunciar a sus propias armas, subraya Bild.
Según los informantes alemanes, Trump habría insistido en que el Ejército de su país no podía entregar ninguno de sus sistemas de defensa aérea, por lo que Europa tendría que recurrir a sus propias reservas para resolver esta cuestión. Sin embargo, ocurre que el Viejo Continente se enfrenta a grandes problemas de la escasez de dichos equipos militares.
Por otra parte, la Administración Trump había informado a Suiza del retraso en la entrega de sistemas Patriot que había ordenado en 2022, ante la necesidad de apoyar a Ucrania. "La entrega estaba programada para que comenzara en 2026 y completarse en 2028", informaron este jueves desde el Departamento Federal de Defensa, Protección de la Población y Deportes (DDPS), agregando que no está claro cuántos sistemas se verán afectados.
Según Bild, se trata de un sistema que al final será financiado por Alemania para destinarlo a Ucrania, si bien aún está en fase de finalización por parte de la empresa de defensa estadounidense Raytheon y no se espera que esté listo hasta dentro de seis u ocho meses.
Escasez de Patriot en Alemania
Si bien Alemania también planea entregar a Ucrania un sistema Patriot de su propio arsenal, el Ejército del propio país carece de este tipo de armas de defensa aérea.
Así, a principios de 2022, Berlín contaba con 12 sistemas Patriot y, en lo que va del conflicto ucraniano, ya se han entregado tres unidades a Kiev. Otros dos sistemas están estacionados en Polonia para proteger el aeropuerto a través del cual la OTAN transporta todo el armamento hacia Ucrania. Otros tres sistemas se están actualizando, por lo que no están operativos; además, al menos un sistema es necesario para llevar a cabo entrenamientos para soldados de la Bundeswehr.
De este modo, actualmente hay un máximo de tres unidades disponibles para la defensa aérea de la propia Alemania y, si Berlín entregara a Kiev uno más, se quedará con dos. Aunque el Gobierno del excanciller Olaf Scholz había ordenado otros ocho sistemas Patriot, está previsto que el primero llegue al país a finales de 2026 y los otros para el año 2029.
