El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, y el presidente de EE.UU., Donald Trump, mantuvieron una conversación telefónica este domingo para discutir el controvertido plan del gabinete de seguridad israelí para que el Ejército tome el control de la Franja de Gaza.
"Los dos hablaron sobre los planes de Israel para tomar el control de los bastiones restantes de Hamás en Gaza con el fin de lograr el fin de la guerra, la liberación de los rehenes y la derrota de Hamás", comunicó el primer ministro del país hebreo en su cuenta de X. Según la Oficina de Netanyahu, durante la llamada este le agradeció a Trump por "su firme apoyo a Israel" desde el comienzo de la guerra.
Anteriormente este domingo, Netanyahu aseveró que su país buscará la paz en Gaza, desmilitarizando la ciudad. "Gaza será desmilitarizada, Israel tendrá la responsabilidad primordial en materia de seguridad, se establecerá una zona de seguridad en la frontera de Gaza con Israel para prevenir futuras incursiones terroristas y se establecerá una administración civil en Gaza que busque vivir en paz con Israel", sostuvo.
Rechazo total
El controvertido plan de Israel ha recibido fuertes críticas en el ámbito internacional, y países como Turquía, China y Rusia expresaron su condena y rechazo. A esto también se suman tensiones dentro del propio Gobierno israelí, así como el rechazo de la población civil.
El sábado más de 100.000 personas salieron a las calles de Israel a protestar contra el plan para controlar la Franja de Gaza.
Asimismo, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, Eyal Zamir, advirtió que esta operación "pondría en peligro a los rehenes y podría conducir a un gobierno militar israelí en Gaza con plena responsabilidad sobre 2 millones de palestinos".