La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, envió a la Cámara de Diputados el proyecto de una nueva Ley Orgánica de la Armada, en medio de la polémica que enfrenta esta fuerza luego de que varios de sus miembros fueran acusados de participar en una red de robo de combustible.
De acuerdo con la iniciativa, que fue desglosada por el diario Milenio, la Armada podrá actuar en el combate de actos ilícitos en el mar a través de operativos de persecución, abordaje, registro e inspección de buques y embarcaciones que transiten la zona económica exclusiva de México y altamar.
En la exposición de motivos, Sheinbaum precisó que los cambios se deben a la necesidad de actualizar la misión de la Armada para proteger los intereses marítimos nacionales, que son prioritarios por su valor estratégico social y comercial, ya que contribuye al desarrollo del país a través de las vías de comunicación marítima, la exploración investigación de los mares mexicanos y el aprovechamiento sostenible y responsable de las riquezas del mar.
El proyecto señala que la Armada participará en actividades de ciberdefensa y ciberseguridad para la conducción de las operaciones militares y en la elaboración e implementación de políticas de defensa. Del mismo modo, contará con la inteligencia artificial como herramienta tecnológica y será la responsable de mantener actualizada la política nacional de defensa marítima.
Una de las mayores novedades es que, si el proyecto se aprueba en el Congreso, el ejercicio de las atribuciones de la Armada de México podrá realizarse en conjunto con la Guardia Nacional, el cuerpo que fue creado durante el pasado Gobierno de Andrés Manuel López Obrador y que Sheinbaum traspasó a la Secretaría de la Defensa Nacional.
Además, la nueva ley modifica los cargos jerárquicos, ya que el Estado Mayor de Operaciones Navales, puesto máximo en la institución, cambia su denominación a Jefatura de Operaciones Navales, con el objetivo declarado de optimizar las tareas en esa área.
