El canciller alemán, Friedrich Merz, rozó un escándalo diplomático durante la reunión de líderes europeos con el presidente estadounidense Donald Trump y Vladímir Zelenski, informa The New York Times, citando fuentes.
A pesar de los esfuerzos de los dirigentes europeos por evitar desacuerdos con Trump, Merz reiteró ante las cámaras que cualquier diálogo entre Zelenski y Putin solo podría darse tras un alto el fuego. En privado, insistió ante el presidente de EE.UU. en la necesidad de al menos congelar los combates durante las negociaciones.
Rusia ha precisado en repetidas ocasiones que quiere lograr una paz duradera, en lugar del alto el fuego temporal promovido por Kiev y sus socios europeos. Tras la cumbre en Alaska, Putin volvió a reiterar que el objetivo de Moscú es una paz duradera y sostenible.
Esta postura es compartida por Trump que, durante la reunión con Zelenski y su grupo de apoyo europeo, puso en duda que una tregua sea necesaria. Por su parte, el líder del régimen ucraniano también cambió su postura tras la reunión, eliminando la condición del alto el fuego como requisito necesario para su encuentro con el presidente ruso, Vladímir Putin.
No obstante, varios países europeos siguen promoviendo su retórica belicista. Sostienen que solo se puede retomar el diálogo después de imponer un alto el fuego y ejercer la máxima presión sobre Moscú.